Después de leer sus mails con sugerencias y peticiones sobre el tema y también el feed de lo que los usuarios buscan en este blog, comparto aquí mis diez puntos para ser una buena amante y disfrutar más a la hora del sexo.
1. No complejos. Cuando estés con alguien no te lo pases pensando en tus defectos, porque vas a transmitir esa inseguridad. Sientete a gusto y sexy contigo misma y es lo que va a percibir tu pareja. La gran mayoría de los hombres no se dan cuenta si tienes celulitis, cicatrices o algunos vellos incómodos. No se los hagas notar mecionando frases como "no me dio tiempo de depilarme", "ya no aguanto esta lonja" o similares, eso sólo los avisará de tus puntos débiles que probablemente ellos ni habían notado. Si recibes algún comentario que pueda bajar los ánimos, no te enojes ni te cohibas, mejor úsalo a tu favor. Un ejemplo: una noche un muchacho me dijo "tienes senos de niña de 13". Me pareció un comentario espontáneo y sincero; la verdad es que mi pecho es pequeño pero yo estoy muy a gusto con él. Así que con una dulce sonrisa le respondí "pero te encantan". Él sonrió, me respondió "como no tienes idea". Debo agregar que ha sido una de las mejores noches que aún llevo en mi memoria.
2. No hacer nada que no quieras. Esta bien experimentar, pero cuando no estás segura de algo o sientes temor, sólo dí que no quieres. Una mujer que conoce sus límites y sabe hacerlos ver a su compañero es más valorada por él que aquella que no sabe decir que no.
3. Sin inhibiciones. Nunca pienses que los hombres te creerán una "cuatro letras" por el hecho de pedir lo que te gusta en la cama o por hacer cosas que viste en películas porno. Al contrario, a ellos les gusta mucho y a ti te da control y te hará sentir libre.
4. Durante el sexo oral, míralo. Disfruta lo que estés haciendo (o recibiendo) y transmítelo con tu mirada. Las sonrisas nunca caen mal. Los hombres son más visuales, no lo olvides.
5. Preliminares. Explora. Cada cuerpo y -¿sobra decirlo?- cada amante son diferentes, no te limítes a las zonas erógenas o genitales, siempre hay más posibilidades igual de excitantes para ambos. Algunas claves: abdómen bajo, línea entre los glúteos, barbilla, línea media del cuello, parte interna del brazo, parte externa del torso...
6. Movimientos. Por ahí dicen que las mujeres somos pasivas. I object. Las que más disfrutan del sexo y al mismo tiempo logran enloquecer a su amante, son las más activas, aquellas que se mueven, cambian de posición y no sólo esperan a que su hombre haga todo el trabajo. Ya sea que él se encuentre adelante, atrás o encima de ti, siempre muevete hacia él, como si quisieras alcanzarlo cada que se aleja o empujalo suave, pero firmemente hacia ti. El resto de los movimientos se irán dando espontáneamente.
7. Habla, sin repetir. Como decía antes, cada persona es diferente. No me gusta usar las mismas frases con diferentes muchachos, prefiero interactuar un poco, explorar, sentir y decirles lo que sienta en ese momento. Algunos tienen ojos agradables, manos expertas, piel suave, labios sexies, pero como no todos son iguales, las posibilidades de halagos son muy grandes. Me gusta decirles lo que me gusta de ellos (siempre y cuando sea cierto) porque me doy cuenta que eso los ánima y crea una conexión empática entre los dos y un mejor desempeño. Así sea tu amante de una sola noche, ocasional o tu pareja de toda la vida, procura mantener comunicación verbal, eso siempre es gratificante y trae resultados positivos para los dos.
8. Innovación. El sexo no tiene que ser siempre igual. Si algo me molesta son los hombres que comienzan besando la boca, cuello, senos, desabotonar el pantalón y todo el largo demás. No me gusta hacer siempre lo mismo, aunque no lo niego, a veces es inevitable. Los preliminares pueden comenzar desde el bar, la oficina o el camino en el auto y prolongarse hasta llegar a una habitación -u otro sitio-. Mi propuesta: alarga un poquito más de lo usual los preliminares y luego inicia de manera diferente. El sexo vestidos a medias puede ser bueno, o tomen una ducha antes, dale a tu pareja un masaje erótico, visiten una sexshop juntos (gracias guerrero por tu sugerencia), cambiar de lugar o escenario, adoptar roles (para aquellos con espíritu histriónico), en fin... muchas y más opciones contra la rutina.
9. No fingir. El fingir no va bien con la seductriz ni la amante. Sé que hay hombres que no saben lo que hacen -cualquiera que sea su razón-; sugiero que intentes guíarlos, muchas veces les haces y te haces un bien al decirles donde y cómo tocar. Pero si tuviste mala suerte y tu hombre es un testarudo sabelotodo que no acepta sugerencias, no seas condescendiente ni buena persona ni finjas de modo que él se crea que te dejo satisfecha y piediendo más. Tampoco te malhumores ni te dejes afectar. Córtalo por lo sano, amable y cortésmente pero sin sobreactuar ni compadecer, la buena amante no está haciendo un favor ni un trabajo.
10. Y por último, una que no te hará mejor amante pero sí te hará mucho bien: procura orinar lo antes posible después de cada relación sexual, así evitarás que las bacterias cercanas a tu uretra asciendan por ella y te provoquen infecciones urinarias.
Bueno, he ahí mis diez principales consejos,espero que sean de utilidad. Mis mejores saludos para todos y todas :)
Derechos reservados. La Tesis del Amor (c) 2007-2010.
